La falta de conocimientos de las nuevas generaciones sobre la cultura vampírica y la licantropía ha generado de la obra de Stephenie Meyer un éxito sin precedentes, tanto en la versión escrita como su adaptación a la pantalla grande, aprovechándose con un monstruoso aparato de marketing directo cuyo target específico es el más vulnerable de nuestra sociedad: los adolescentes.
Con localidades agotadas desde la primera función durante el fin de semana de estreno en Estados Unidos y México, se presenta "Luna Nueva", continuación de "Crepúsculo" (pueden leer esa reseña aquí) como una verdadera miniserie en pantalla grande iniciando como continuación y culminando para ser continuada en lo que promete ser otro desastre cinematográfico tan exitoso en taquilla como este.
Bella (Kristen Stewart) sigue enamorada del vampiro mistrerioso Edward Cullen (Robert Pattinson) quien a su vez nos muestra -de nuevo- que no quiere arrebatarle la vida para convertirla -siendo este el más agotador de los clichés vampíricos- por lo que decide abandonarla.
Bella descubre que además de vampiros también hay hombres lobo y uno de ellos esta enamorado de ella -más clichés- y a su vez intentará protegerla de los vampiros para evitar que le arrebaten la vida. Una vez más la eterna lucha entre los chupasangre y los licántropos se presenta en la pantalla grande pero de una manera irresponsable y hasta irrespetuosa, para los amantes del género de terror, a través de jovenes actores que histriónicamente no ofrecen nada más que lo visual para el público target, colocando a la cinta en el género romantico/dramático siendo esto un lugar poco honrroso para los vampiros y los hombres lobo. Digno de destacar es la participación secundaria de Ashley Greene en el papel de Alice Cullen; Green muestra un interesante trabajo actoral y esperemos que esta producción le abra puertas a proyectos fílmicos con más contenido histriónico.
Asimismo, la realización de esta cinta ha resultado un verdadero desastre para el director Chris Weitz (a quien recordamos más por haber estado al mando del set de la cinta "La brújula dorada" (The Golden Compass, 2007) con Nicole Kidman y Daniel Craig en los protagónicos). Con un exceso de tomas en Close Up y Medium Shot ha intentado darle un toque adicional romántico-dramático a las escenas, de la per se melosa trama; junto con la repetición de escenarios ha generando una aburrición visual, que unido con la larga duración de la cinta (130 min.) hace que los cinéfilos se acomoden y recomoden en su butaca una y otra vez tratando de evitar el cansancio físico que provoca el tedio durante la proyección cinta; con la excepción de un desconcertante brinco visual a la mitad de la película. Mientras que los jóvenes fans de la bella Bella, el palido Edward y el musculoso hombre lobo Jake (interpretado por el novel actor de televisión Taylor Lautner) podrán darse un verdadero festín visual.
Cabe destacar el enorme desperdicio actoral que ha generado esta producción al incluir en el reparto a la camaleónica Dakota Fanning quien escasamente tiene solo 2 o 3 líneas en la película y que a sus 15 años de edad suma ya más de 40 participaciones en televisión, super-producciones cinematográficas y una nominación al Oscar.
La próxima entrega de esta serie, "Eclipse", se encuentra ya en etapa de post-producción y esta planeada para proyectarse en otoño del 2010. Esperamos que el director David Slade logre un acierto al mando de su primera super producción y pueda borrar un poco los malos momentos que "Luna Nueva" ha hecho pasar a los verdaderos cinéfilos.
Finalmente puedo decirles que "Luna Nueva" es una cinta de género romático que sin duda pasará a ser una película más de catálogo de videotecas públicas.
Con localidades agotadas desde la primera función durante el fin de semana de estreno en Estados Unidos y México, se presenta "Luna Nueva", continuación de "Crepúsculo" (pueden leer esa reseña aquí) como una verdadera miniserie en pantalla grande iniciando como continuación y culminando para ser continuada en lo que promete ser otro desastre cinematográfico tan exitoso en taquilla como este.
Bella (Kristen Stewart) sigue enamorada del vampiro mistrerioso Edward Cullen (Robert Pattinson) quien a su vez nos muestra -de nuevo- que no quiere arrebatarle la vida para convertirla -siendo este el más agotador de los clichés vampíricos- por lo que decide abandonarla.
Bella descubre que además de vampiros también hay hombres lobo y uno de ellos esta enamorado de ella -más clichés- y a su vez intentará protegerla de los vampiros para evitar que le arrebaten la vida. Una vez más la eterna lucha entre los chupasangre y los licántropos se presenta en la pantalla grande pero de una manera irresponsable y hasta irrespetuosa, para los amantes del género de terror, a través de jovenes actores que histriónicamente no ofrecen nada más que lo visual para el público target, colocando a la cinta en el género romantico/dramático siendo esto un lugar poco honrroso para los vampiros y los hombres lobo. Digno de destacar es la participación secundaria de Ashley Greene en el papel de Alice Cullen; Green muestra un interesante trabajo actoral y esperemos que esta producción le abra puertas a proyectos fílmicos con más contenido histriónico.
Asimismo, la realización de esta cinta ha resultado un verdadero desastre para el director Chris Weitz (a quien recordamos más por haber estado al mando del set de la cinta "La brújula dorada" (The Golden Compass, 2007) con Nicole Kidman y Daniel Craig en los protagónicos). Con un exceso de tomas en Close Up y Medium Shot ha intentado darle un toque adicional romántico-dramático a las escenas, de la per se melosa trama; junto con la repetición de escenarios ha generando una aburrición visual, que unido con la larga duración de la cinta (130 min.) hace que los cinéfilos se acomoden y recomoden en su butaca una y otra vez tratando de evitar el cansancio físico que provoca el tedio durante la proyección cinta; con la excepción de un desconcertante brinco visual a la mitad de la película. Mientras que los jóvenes fans de la bella Bella, el palido Edward y el musculoso hombre lobo Jake (interpretado por el novel actor de televisión Taylor Lautner) podrán darse un verdadero festín visual.
Cabe destacar el enorme desperdicio actoral que ha generado esta producción al incluir en el reparto a la camaleónica Dakota Fanning quien escasamente tiene solo 2 o 3 líneas en la película y que a sus 15 años de edad suma ya más de 40 participaciones en televisión, super-producciones cinematográficas y una nominación al Oscar.
La próxima entrega de esta serie, "Eclipse", se encuentra ya en etapa de post-producción y esta planeada para proyectarse en otoño del 2010. Esperamos que el director David Slade logre un acierto al mando de su primera super producción y pueda borrar un poco los malos momentos que "Luna Nueva" ha hecho pasar a los verdaderos cinéfilos.
Finalmente puedo decirles que "Luna Nueva" es una cinta de género romático que sin duda pasará a ser una película más de catálogo de videotecas públicas.